martes, 11 de julio de 2017

Tres años celebrando la vida

Dicen que a la tercera va la vencida, y muchas veces es así... pero, si algo he interiorizado en los últimos años es que todas las batallas en las que hayas aprendido algo en positivo, has vencido en cierta medida. Para cada uno de nosotros, cada día es un regalo, y gente como yo lo valoramos a cada instante. No por ser especiales, no por ser fuertes, no por ser sensibles... Por haber estado cerca del otro barrio y estar aquí para contarlo. Por haberle visto la cara a la muerte, y estar aquí para sonreírle a la vida. Como oí una vez, y me encantó, vivimos temiendo la muerte, cuando a lo que realmente le tememos, muchas veces, es a la vida. 

Cada día es un regalo, y lo agradezco cada mañana... pero hoy en especial, y es la excusa para celebrar. Hoy hace 3 años había empezado la batalla más dura y larga de mi vida, y lo hacía agradecida. Celebraba tener la oportunidad de llegar a tiempo para luchar, y entre agujas, puntos, pastillas y goteros, intentaba mantener la sonrisa.

Un año más tarde, celebraba la libertad en el más amplio sentido de la palabra. Había vuelto a nacer, todo parecía nuevo de nuevo. El primer baño en el mar fue una experiencia mágica, el primer baile, cada paseo, un día de lluvia, una cita... todo eran pequeñas nuevas - viejas aventuras. 


Al año siguiente celebraba aún más llena de vida, cada día sintiéndome mejor. Con la misma ilusión, esperanza y deseos, pero cada día con más fuerza, menos cansancio y más energía. Cada día las cosas se hacían más sencillas. Volvía a sentirme verdaderamente libre, dueña de mi. Poco a poco volvía a ser independiente... De nuevo éramos mi alma, mi cuerpo y yo, y podíamos con todo. 

Hoy, tres años más tarde y unos cuantos postoperatorios, puedo decir que sí... he acabado! Esta historia se ha acabado... y espero sea así por mucho tiempo, o el adecuado. Diría que, por fin, me siento completa, plena... pero sería un error, pues siempre lo estuve.

Por primera vez en toda mi vida adulta, no he necesitado NADA. Puede que esto hoy no lo entiendas, pero no... No necesito nada. Lo tengo todo cuando abro los ojos cada mañana, siento el aire llegar a mis pulmones, oigo el silencio y me hago un café. No necesito nada cuando me doy cuenta que he ido recuperando el olfato, el gusto, la sensibilidad, ya casi no se me duermen ni las manos ni los pies, tengo uñas, pestañas.... Hasta unos rizos preciosos. No necesito nada cuando veo la sonrisa de mi padre, los ojos de mi hermano al hablar de sus metas a punto de cumplir, cuando oigo a mis amigas reír por algo absurdo, cuando suena el teléfono y es alguien especial al otro lado del mundo.... No necesito nada más.    

A veces lo tenemos todo y no somos realmente conscientes de ello y, como la vida me regala la oportunidad de haber llegado hasta aquí, quiero retribuirle ofreciendo la oportunidad de recordárselo a todo aquel que tenga cerca, de ser feliz sin más y estar agradecido. Sí, ten sueños y busca la manera de cumplirlos; Ten metas, deseos, caminos por recorrer... pero recuerda que la meta no es el destino, sino el camino. Lo que haces cada día, y no sólo eso... sino lo que tienes a cada paso. Por absurdo que te parezca, siente el aire que respiras, cada caricia, disfruta de cada sabor que paladees, cada imagen que veas. Se agradecido a cada momento y vívelo realmente... es único. 

No pases la vida buscando la felicidad, ni la paz, ni el amor... están en ti, aquí y ahora, en ninguna otra parte. 

Vive tu vida como tú quieras y no como quieran los demás, haz lo que sientas que es mejor y ten presente que, para salvar a otro, primero tienes que salvarte a ti mismo; que para cambiar el mundo, tienes que empezar por casa, y que nunca sabremos cuanto tiempo nos queda... si hoy es nuestro último adiós o el primero de muchos más de los que podamos contar. Por lo que, no te dejes cosas en el tintero, no esperes ocasiones especiales, di lo que sientes y actúa en consecuencia con tus pensamientos, emociones y valores. 




lunes, 14 de noviembre de 2016

Autoexamen de mama

El mes pasado se celebró el Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer de Mama. Pero esto es una lucha que debe llevarse a cabo todos los días, por ello un día cualquiera como hoy te hablo del tema y te invito a revisarte periódicamente en casa.

Es importante tener en cuenta que el cáncer de mama afecta tanto a mujeres como a hombres, aunque estos últimos en menor medida. Es una enfermedad que no avisa, pero podemos adelantarnos a ella. Prevenir es curar, para lo que una detección precoz es fundamental. 

Según la AECC (Asociación Española Contra el Cáncer), en su actualización sobre "Cáncer de Mama" del 05/10/2016,  "En España se diagnostican unos 26.000 casos al año, lo que representa casi el 30% de todos los tumores del sexo femenino en nuestro país. La mayoría de los casos se diagnostican entre los 35 y los 80 años, con un máximo entre los 45 y los 65..." 

¿Por qué es tan importante una detección temprana? Por varias razones, unas más obvias que otras. Una que no suelen comentarte tanto es que, además de darte más posibilidades de supervivencia, cuanto antes sea detectado y más pronto sea atacado, probablemente, y no en todos los casos, menores sean tus secuelas. 

Siempre habrá secuelas. Es un tratamiento duro, altamente agresivo. Ten en cuenta que con él se matan células cancerosas, pero también células sanas. Ése veneno que te salva, también mata en cierta manera... La quimioterapia mata para sobrevivir. Igualmente la radioterapia, es muy agresiva y tu piel -en la zona radiada- nunca volverá a ser la misma. 

Si hablamos del tratamiento quirúrgico, es más evidente aún. No es lo mismo una tumorectomía (extracción del tumor), una cuadrantectomía (cuando se extirpa el cuadrante donde se localiza la masa tumoral), o una mastectomía (supresión completa de la mama).

Pero no sólo eso, sino que si detectas algo a tiempo puede que simplemente sea una masa benigna. Las masas benignas con el tiempo pueden llegar a convertirse en tumoraciones, de ahí la importancia de mantenerte controlad@. 

No debemos vivir alarmados, con miedo, sugestionados... Simplemente cuidarnos, conocernos y autoexaminarnos periódicamente. Mi madre siempre decía "nosotros somos nuestros mejores médicos"... ¡OJO!, no para automedicarnos. Ella se refería al hecho de que nadie va a conocernos mejor que nosotros mismos. Nadie puede saber mejor que nosotros cuánto dolor sentimos, qué nos sienta bien o mal, etc. Pero ello tampoco viene por arte de magia, tienes que estar atento a las señales que te envía el organismo. 

Aquí te dejo un breve vídeo sobre cómo efectuar el autoexamen de mama. 




Recuerda: Aunque vivimos en un mundo en el que nos rodea la comida basura, el estrés se ha apoderado de nosotros en todos los aspectos de la vida y muchos, por trabajo y ritmo de vida, tendemos a llevar una vida bastante sedentaria... Somos nosotros los que tenemos el poder de elección sobre cómo queremos vivir y hasta qué punto permitimos que nos afecten las cosas. 

Suena reiterativo, pero formarte un orden prioridades vitales te ayudará a relativizar un poco más las cosas y vivir un poco más en paz y armonía. De momento, ésta es la única vida que conocemos con certeza. Vívela, disfrútala, se feliz en cada cosa que hagas, ama. Ama a tus seres queridos, las personas con las que compartes a diario por los motivos que sea, tu trabajo, tu hogar, el suelo que pisas...



domingo, 6 de noviembre de 2016

El poder del abrazo

Si buscamos abrazar en la RAE, encontraremos " Ceñir con los brazos; Estrechar entre los brazos en señal de cariño", pero... ¿Somos realmente conscientes de todo lo que transmite y aporta el simple hecho de abrazar o ser abrazados, de cuánto se puede decir sin hacer uso de una sola palabra?

A principios de verano, estaba en un emotivo evento y se me acercó una señora que aún no conocía. Me miró a los ojos y sonriendo me abrazó con tal ímpetu, energía y cariño, que me conmovió. Dijo tanto sin haber abierto la boca, que sólo podía ser correspondido con un gesto similar.

No sé dónde leí hace mucho, que un abrazo puede salvar un vida... y desde aquel momento no tuve duda de que era así. No es que un abrazo obre un milagro divino, sino que con él podemos darle a alguien la fuerza y ganas de vivir en momentos de flaqueza.

No hace falta buscar mucho en la red para encontrar cantidad de experimentos callejeros, como los famosos "Abrazos gratis". Videos, algunos, realmente conmovedores que nos transportan por unos minutos por cantidad de emociones, todas ellas de considerable intensidad.

Te invito a ver uno de ellos. Cuando lo hagas, fíjate en los rostros de satisfacción, en la sinceridad del gesto de muchos de ellos.


Los 4 beneficios fundamentales que éstos nos aportan son: fortaleza, seguridad, confianza y protección. En un gesto tan sencillo como éste, damos y recibimos cantidad de energía. Podemos sentir todo lo que la otra persona nos transmite. De hecho, está demostrado que con él se liberan endorfinas y es tal su poder que hasta se considera una terapia generadora de bienestar.

La abrazoteriapia es empleada como una terapia coadyudante en tratamientos para trastornos, como por ejemplo, los trastornos depresivos.

Los abrazos ayudan reducir la presión arterial, cefalea, ansiedad, la sensación de soledad, el estrés, la depresión, el miedo... Fortalecen la autoestima, estimula los sentidos, aportan quietud, paz, y además, la liberación de oxitocina ayuda a estrechar lazos afectivos. Como si todo esto fuera poco, son grandes ansiolíticos y aumentan la liberación de dopamina.

Sabiendo todo esto, ¿vas a dejar pasar un día más sin abrazar y ser abrazado?